lunes, julio 23, 2012

Fe de erratas

Publicado en Estepona Información el 14/07/2012

Hoy me toca pedir disculpas a Grupo Ortiz, empresa adjudicataria de varios servicios municipales, por haberla confundido con las empresas de Enrique Ortiz, empresario valenciano imputado en diversas causas de corrupción.

La coincidencia del nombre y la confusión que me produjo el rastreo por internet de las actividades del empresario alicantino hizo que cometiese el error de atribuir a Grupo Ortiz vinculación con el citado empresario. Desde aquí quiero manifestar mi pesar por lo que ha sido solo una confusión desafortunada que en ningún caso quisiera perjudicase a los legítimos intereses de Grupo Ortiz en Estepona.

El que repetidamente se aludiese en informaciones periodísticas a las empresas del Sr. Ortiz (Grupo Cívica) como “empresas del grupo Ortiz” y que además de dedicarse a la construcción el Sr. Ortiz participase en diferentes concursos de servicios municipales me hicieron caer en este imperdonable error. Común por otra parte ya que, según nos cuenta el propio Grupo Ortiz, no es la primera vez que ha sido confundido en parecidos términos.

No obstante lo anterior, todavía sigo teniendo dudas, como ciudadano de Estepona, del buen negocio que ha realizado Grupo Ortiz concurriendo a concesiones de servicios públicos en nuestra ciudad. No entiendo el interés de esta empresa de contratar con un organismo en quiebra, incapaz de afrontar sus deudas, como  repetidamente han anunciado sus gestores. Así, y sin dudar de la intención de Grupo Ortiz en Estepona, absolutamente legal, y que su interés es conseguir un legítimo beneficio de su actividad industrial, sigue siendo llamativo a ojos de un extraño que una empresa arriesgue su patrimonio, emprenda inversiones y asuma los costes salariales de al menos 104 trabajadores subrogados de un Ayuntamiento que hoy mismo está despidiendo a otros 176.

Así, y lamentando que ya se hayan producido bajas en la plantilla municipal asumida por Grupo Ortiz en el servicio de Parques y Jardines, desde aquí le deseo a sus gestores el mejor de los futuros en nuestra localidad, aunque mucho me temo que éste no sea precisamente halagüeño.

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