lunes, enero 24, 2011

De moda

Publicado en Estepona Información el 22/01/2011

Lo verde, lo ecológico, está de moda. Y más en medio de la campaña electoral. Todos los partidos se suman de una manera u otra al recurso más en boga de la manera que sea.

De forma torpe y demagógica como la campaña del PP de “reforestación”, anunciando más árboles en el término municipal. O de manera sesgada y mentirosa como el PSOE, alardeando de instalaciones como el Parque Selwo o un denominado proyecto de bio-hotel que ni suponen modelo de explotación ecológica alguno ni tienen nada que ver con la iniciativa pública que debería liderar la administración.

Mientras, tras estos anuncios la práctica política cotidiana de ambas formaciones sigue incidiendo en la destrucción sistemática del territorio. Promoviendo el mismo modelo de urbanización especulativo. Léanse convenios con dictadores saudíes, “nuevos ricos” y bancos, centros comerciales paraíso del consumo desmedido, obras públicas faraónicas e inútiles o prometiendo a sus electores la consolidación de la urbanización como solución a la problemática de las construcciones ilegales en nuestros campos. Y todos de acuerdo, los del PSOE y los del PP.

Cierto es que las medidas de reforestación o el fomento de un nuevo tipo de hostelería son positivas para la recuperación de nuestra maltratada economía y en cierta medida sostenibles. Sin embargo, la práctica de políticas verdes va mucho más allá que el anuncio de la iniciativa de un particular o el reparto de raciones de paella a los electores mientras se plantan un puñado de arbolitos.

Hay que profundizar en el cambio productivo de la localidad renunciando de una vez por todas al crecimiento desordenado. Perdón, rectifico. Renunciando al crecimiento. Es el momento de asumir que nos toca reducir, decrecer, reutilizar en lugar de derrochar. Moderar el consumo en lugar de favorecerlo. Es momento de ajustarse el cinturón en lugar de seguir insistiendo en anudarlo al cuello, como hasta ahora.

Si de verdad quieren estar a la moda verde, señores de los partidos mayoritarios, díganle a sus electores la verdad: No se puede urbanizar indefinidamente.

lunes, enero 17, 2011

Hay alternativas

Publicado en Estepona Información el 14/01/2001

Reconozcámoslo, no volverán a crecer urbanizaciones como rosquillas en el territorio de la Costa. No porque no tengamos políticos dispuestos a recalificar hasta los pinsapos de Los Reales, sino por la desaparición de un mercado basado en la especulación y el dinero fácil y que siempre estuvo alejado de las necesidades de la población y la realidad económica.

Ahora, pasada la tormenta de la urbanización feroz construida a golpe de sospechosos convenios bajo examen judicial, nos queda una suerte de “zona cero” plagada de grúas y maquinaria paradas, hipotecas de imposible realización, miles de viviendas vacías y trabajadores agotando las prestaciones por desempleo. Ha llegado el momento de afrontar una nueva Ley del Suelo que reconozca las carencias, los errores y las injusticias que con los ciudadanos se han cometido.

En la nueva Ley deberán incorporarse de forma inequívoca los mandatos constitucionales que imponen la función social de la propiedad y la exigencia de vivienda digna para todos los ciudadanos. Si están vacías, las viviendas, en lugar de ser usadas como instrumentos de mercadeo infame o trapicheo vergonzoso, deberán incorporarse al mercado de la vivienda protegida de forma obligatoria, cumpliendo así tan importantes preceptos constitucionales. Sí, mucho más importantes que el tan reclamado por algunos a la presunción de inocencia.

No tiene sentido por tanto que los planes de ordenación reserven el 30% de los nuevos suelos a urbanizar cuando el parque de viviendas vacías es más que suficiente para absorber la demanda de vivienda protegida. Los ingresos urbanísticos que ahora se deben destinar obligatoriamente al patrimonio municipal del suelo podrán destinarse, por la misma razón, a la rehabilitación de viviendas y edificios públicos. De forma muy especial dirigida a la optimización y el uso de energías renovables. Como ven, hay alternativas sostenibles ecológica y socialmente al negocio inmobiliario de unos pocos y, por si fuese poco, hasta nicho de empleo para los que antes eran albañiles, fontaneros o electricistas.

miércoles, enero 12, 2011

Renovarse o morir

Publicado en Estepona Información el 08/01/2011

Comienza 2011 y se acerca el momento de decidir el modelo de nuestra ciudad para los próximos cuatro años. Si nos fijamos en las propuestas de los partidos tradicionales y sus émulos localistas o con vocación de bisagra, veremos que todos siguen basando el futuro en propuestas que desde el punto de vista de la ecología política entendemos agotadas.

En la agenda de la derecha, de la izquierda y también en la de los partidos sin ideología definida (léanse BNA, UPyD, E-2007, o exgilistas varios) asoma como parte fundamental de su discurso la palabra “inversores”. Como si de una mágica panacea se tratase todos hablan de hacer llamamientos a la inversión, inmobiliaria por supuesto, refiriéndose sistemáticamente a la necesidad de ser atractivos y amables con el cariñoso inversor que nos colocará en las altas cotas de la miseria que actualmente padecemos.

Obviando que el negocio del ladrillo está obsoleto por las propias y ridículas normas que el mercado marcó en la década pasada y olvidando de forma intencionada el daño estructural profundo que en nuestra economía ha producido.

Ha llegado el momento de plantear otras alternativas, alejarnos definitivamente del especulador inmobiliario, del corruptor de políticos y funcionarios, del que destruye el territorio a golpe de dinero del narcotráfico, la esclavitud o el tráfico de armas. Y miren que me gustaría ser menos categórico pero la realidad es que, parafraseando a Antonio Romero, la Costa Nostra ha sido el paraíso de las mafias delincuenciales de todo el mundo. Incluyendo entre estas a la sanguinaria dictadura árabe saudí tan apreciada por los gobernantes socialistas.

No hacen falta más viviendas en una Costa saturada, sobreexplotada, que carece de equipamientos e infraestructuras para la población y que ve constantemente maltratado o amenazado su maravilloso patrimonio natural. Es el momento de plantear otras alternativas económicas. Basadas en el territorio y sus capacidades, las necesidades a cubrir y los límites naturales. Alternativas sostenibles, verdes. Es el momento de renovarse o morir.

viernes, enero 07, 2011

Se acabó

Publicado en Estepona Información el 31/12/2010

Y el 2010, que será de infausto recuerdo, termina de una puñetera vez aunque dejándonos de herencia el terrible 2011, electoral y, si nadie lo remedia, de consolidación de la crisis.

Como es habitual los resúmenes del año son triunfalistas entre los que gobiernan y derrotistas entre los que aspiran a sucederlos. Pero todavía es posible sorprenderse de los extremos a los que el homo político es capaz de llegar.

Destaca Valadez entre los logros de su mandato la obra pública desarrollada en el municipio. Asumiendo como propia toda la que de otras administraciones viene, que al fin y al cabo también gobiernan “los suyos” en Sevilla y Madrid. Olvidando el carácter extraordinario de unas aportaciones que se han demostrado pírricas en el pretendido fin de fomento del empleo y obviando la mala elección de algunas de ellas cuando al Ayuntamiento le tocaba esa decisión.

Orgulloso se muestra también de cerrar los convenios urbanísticos que dejó pendientes su antecesor, Antonio Barrientos. A David Valadez le cabe el dudoso honor de firmar con los representantes de la dictadura árabe saudí. O facilitar el camino para su futuro centro comercial y su recalificada parcela en primera línea de playa a unos promotores que tan generosos han sido con los partidos políticos en sus campañas electorales. También es suyo el intento de finiquitar el mal llamado proyecto universitario a manos de los usureros dueños de los terrenos de la Herencia Nadal-Guerrero. Dese luego, mejorando al anterior equipo de su partido, ellos fueron incapaces de tantos logros. Otro gran gestor.

Ajeno al ridículo que significan sus palabras, obvia el evidente deterioro que el PSOE ha provocado en la vida colectiva y se pavonea ignorando la carencia de equipamientos, la ruina de la institución, la desidia de una plantilla diseñada por enchufe y una falta de visión que comparte con el resto de la clase política. Aún piensa en el ladrillo como solución a nuestros males.
Del recambio previsto, qué decir, ya saben qué pienso del neogilismo de García Urbano. En fin, que tengan todos un feliz 2011, casi ná.