sábado, junio 26, 2010

Una vuelta de tuerca

Publicado en Estepona Información el 26/06/2010

Aunque no está asumido por la población ni por los mandatarios, jamás nuestra Costa volverá a ser “lo que era”. Cuando digo esto me refiero a que está finiquitado para siempre el falso “paraíso” de la construcción galopante que generaba ingresos multimillonarios para promotores, especuladores varios y políticos avispados y que al tiempo repartía algunas migajas a las administraciones locales y también generosos sueldos, aparentemente, a profesionales de oficios como la albañilería, carpintería o electricidad.

Acabado el sueño del interminable paisaje de grúas y la procesión de camiones bañera cargados de áridos por carreteras y remotos caminos, llega el momento de replantearse el futuro para los perjudicados de la anterior situación. A mí me parece que las víctimas de la crisis no son ni los bancos que prometieron y prestaron el oro y el moro, ni los promotores que han desplazado sus capitales a futuros paraísos de la especulación ni los políticos sobre los que pende, afortunadamente, la espada de la justicia.

Los damnificados hemos sido todos los ciudadanos de a pie que ahora sufrimos el desempleo, la carencia de servicios sociales y una estructura económica que hay que cambiar de manera inmediata.

Es el momento de promover cambios legislativos que dejen de beneficiar al depredador del territorio, que no contemple absurdas cuotas de V.P.O cuando el parque de vivienda vacía es inasumible por un mercado inexistente fruto de anteriores excesos. Las propuestas deben ir por la recalificación obligatoria de la vivienda de renta libre y por el apoyo a fórmulas cooperativas de trabajadores que permitan su reclasificación desde la obra nueva a la reforma y adaptación progresiva de los edificios actuales a nuevos estándares de aprovechamiento y eficiencia energética.

Desde Los Verdes exigimos una vuelta de tuerca que permita la recolocación progresiva de los trabajadores y la utilización eficaz de los fondos públicos en pos de políticas sostenibles. Aunque estas medidas no sean del agrado de los apóstoles del hormigón y la corrupción urbanística.

lunes, junio 21, 2010

Harto de notorios

Publicado en Estepona Información el 19/06/2010

Tristemente, en Estepona hace demasiado tiempo que se aparcó el debate de las ideas, de las propuestas y del futuro para ser sustituido por el endogámico debate de las personas, los políticos, los aspirantes a políticos y los eternos segundones de los políticos.

Ahora, intensificando la permanente campaña electoral que vivimos, las cuestiones importantes de la localidad no son las posibles alternativas a una situación crítica en lo económico y que amenaza terribles tiempos en lo social. Hoy lo más importante es el currículum de un aspirante a califa en lugar del califa o las visitas reiteradas de supuestos pesos pesados de la política supramunicipal. Y, por si fuese poco, el único interés de las cuestiones a debatir es quién es el más culpable de la crisis.

Una discusión siempre absurda, que todos conocemos la verdad. Cuando alguien le dice a otro “y tú más” ambos tienen razón. El extraño maridaje, la coincidencia de intereses y, sin ninguna duda, la corrupción, han hecho coincidir a casi todos los mandatarios en las dos causas fundamentales del actual estado de cosas.

Todos han coincidido siempre en ver nuestro municipio como eterno generador de ingresos inmobiliarios y han visto el ayuntamiento como un objetivo en lugar de como un fin.

Los Verdes queremos romper con esa dinámica. Intentaremos alejarnos de las disputas entre políticos que sólo interesan a los políticos. A nosotros os interesan los problemas de los ciudadanos y lo que el ayuntamiento pueda hacer por ellos, y para eso es necesario centrar todos los esfuerzos en encontrar las soluciones y aportarlas a la comunidad en lugar de insistir en la estéril pelea barriobajera de alcaldes, imputados y candidatos.

Algunos, notorios personajes, pretenden hacernos creer que su simple llegada al poder resolverá de forma mágica todos los problemas. No hay varitas mágicas ni nadie que las maneje, aunque sí que hay posibilidades de futuro, modestas, que exigirán un cambio importante de mentalidad en todos los ciudadanos. Y Los Verdes vamos a intentar transmitirlas a la sociedad.

sábado, junio 12, 2010

Otra vez cien años

Publicado en Estepona Información el 12/06/2010

El PSOE anda nuevamente de celebración centenaria, si coincidiendo con las primeras municipales post constitucionales se celebraba el centenario de la fundación del partido de Pablo Iglesias, ahora toca celebrar la constitución del primer grupo parlamentario socialista.

Tengo que confesar que yo también me siento partícipe de esas celebraciones. Pues me considero heredero y deudor de Pablo Iglesias, Largo Caballero o Julián Besteiro con los que pretendo compartir los deseos de progreso e igualdad que les inspiraron y sigo utilizando un marxismo que todavía hoy sirve como instrumento de análisis de la realidad.

Lamentablemente, los poseedores de las otrora gloriosas siglas no se significan precisamente por la defensa de su historia ni sus mártires y tampoco, y ahí está lo más grave, comparten con los fundadores la intención de acabar con la desigualdad e imponer la justicia social.

Estos neosocialistas son más bien los que propiciaron el liberalismo económico más injusto, la cultura del pelotazo, amparo y refugio de corrupción y en estos momentos son el soporte de todo aquello contra lo que lucharon Pablo Iglesias y sus compañeros.

Ahora mismo el PSOE es un peón más a las órdenes del sistema financiero mundial, instrumento de las grandes corporaciones y cómplice del empobrecimiento de las capas más desfavorecidas de la población en todo el mundo.

Podría salvar de la quema al militante honrado, a cada uno de los idealistas que albergan corazón y sentimiento socialista, podría delegar las responsabilidades en unas cúpulas podridas y alejadas de los problemas de los trabajadores. Sin embargo, haciendo eso olvidaría que esa militancia ha asistido complacida a la entrada en la OTAN, al terrorismo de estado de los GAL, a la entrega al capitalismo feroz del patrimonio público industrial o a la entronización de alcaldes y concejales abyectos y corruptos.

No hay solución para un partido que sigue felicitándose de contar con Felipe González, Carlos Solchaga o Zapatero y que, a escala local, añora a Barrientos y Flores. Ni en otros cien años.

Cosa de brujas

Publicado en Estepona Información el 05/06/2010

Esta semana, quizá coincidiendo con el Día Mundial de Medio Ambiente, la concejala del ramo de Estepona ha anunciado a bombo y platillo la concesión a Estepona nada más y nada menos que de la Bandera Verde Municipio Responsable.

Un galardón otorgado por una desconocida entidad privada que no publicita en su página web ni la convocatoria de tales galardones, ni los criterios elegidos para su concesión, ni los méritos concretos que cada municipio ha aportado al medio ambiente mundial para ser acreedor a tan verde condecoración.

Aunque, si lo analizamos, la concesión del citado premio tiene un carácter amargo incluso para la ecológica concejala Lina Rivas, pues ella misma nos participa que la bandera recibida es únicamente en relación al apartado denominado por la desconocida Federación de Usuarios y Consumidores Independientes como “Educación Medioambiental y Participación Ciudadana”, así que implícitamente reconoce que la citada institución privada no ha concedido premio alguno relativo a la gestión de residuos, la limpieza, el consumo energético o la contaminación. Aspectos sin duda de tanta importancia como el premiado y que no son en absoluto bien considerados.

Uno se revela como escéptico absolutamente cuando de estos pintorescos premios medioambientales se refiere. No podemos dejar de referirnos a la reiterada concesión de “Banderas Azules” a playas de la localidad que merecieron, esta vez con todas las de la ley, la Bandera Negra de Ecologistas en Acción por vertidos de aguas residuales o el abusivo y sistemático incumplimiento de la Ley de Costas.

Recordamos también aquellas “Escobas” de oro o plata, auténticos alardes de brujería, compradas por el Sr. Crespo y el Ayuntamiento a entidades privadas en las que el ánimo de lucro era la única de sus motivaciones. La sospecha que se cierne sobre estos certámenes sin publicidad, manejados desde oscuras organizaciones es tanta que más que alardear de estos galardones deberían emitirse notas de prensa declarándose ajenos absolutamente a cualquiera de los trámites que estos “premios” comportan.