Publicado en Estepona Información el 19/12/2009
Cualquiera que pasee por Estepona ha tenido oportunidad de oír alguna de las tristes historias personales que nos cuentan los trabajadores de las empresas municipales. Suelen ae los grupos profesionales más modestos, como limpiadoras y miembros de las brigadas operativas. Y hoy, a día 19 de diciembre acaban de recibir la nómina ordinaria esperando sine die la extraordinaria de invierno.
Caseros reclamando el alquiler, bancos exigiendo descubiertos y tarjetas de crédito. Abusando de la generosidad y paciencia de tenderos, amistades y familiares. La nómina mensual del ayuntamiento deja de ser una broma o un arrojadizo argumento político para convertirse en tragedia humana o, como mínimo, quebradero de cabeza inmerecido para los trabajadores.
No es momento de aplazar las ineludibles decisiones que hay que tomar respecto a la situación, no se puede andar mendigando ante la administración andaluza mientras el desconocido plan de saneamiento de las finanzas municipales sigue dormido en no se sabe qué cajón de qué político local. No se puede recurrir a la ayuda exterior mientras en el interior nos contentamos con la medida demagógica o el parche.
Propongo, para favorecer el que los trabajadores honrados, cumplidores y sacrificados puedan cobrar regularmente sus salarios puesta en marcha inmediata de un E.R.E muy concreto que además de mejorar significativamente el capítulo de gastos de personal ayudaría a conseguir la tan ansiada paz política en nuestro ayuntamiento.
Es indignante comprobar como puestos de confianza políticos, dirigentes de los partidos políticos ocupan altos cargos en la “dirección” de los diferentes departamentos municipales después de haber consolidado fraudulentamente un puesto de trabajo que no merecen y que casi siempre es innecesario. Enchufados con grandes sueldos, escasa e inútil actividad que ahora son defendidos por los sindicatos como si se tratase de honradas limpiadoras o peones de jardinería. A la calle con 20 días de indemnización esos directores innecesarios, no son trabajadores ni nunca los hemos necesitado.
Cualquiera que pasee por Estepona ha tenido oportunidad de oír alguna de las tristes historias personales que nos cuentan los trabajadores de las empresas municipales. Suelen ae los grupos profesionales más modestos, como limpiadoras y miembros de las brigadas operativas. Y hoy, a día 19 de diciembre acaban de recibir la nómina ordinaria esperando sine die la extraordinaria de invierno.
Caseros reclamando el alquiler, bancos exigiendo descubiertos y tarjetas de crédito. Abusando de la generosidad y paciencia de tenderos, amistades y familiares. La nómina mensual del ayuntamiento deja de ser una broma o un arrojadizo argumento político para convertirse en tragedia humana o, como mínimo, quebradero de cabeza inmerecido para los trabajadores.
No es momento de aplazar las ineludibles decisiones que hay que tomar respecto a la situación, no se puede andar mendigando ante la administración andaluza mientras el desconocido plan de saneamiento de las finanzas municipales sigue dormido en no se sabe qué cajón de qué político local. No se puede recurrir a la ayuda exterior mientras en el interior nos contentamos con la medida demagógica o el parche.
Propongo, para favorecer el que los trabajadores honrados, cumplidores y sacrificados puedan cobrar regularmente sus salarios puesta en marcha inmediata de un E.R.E muy concreto que además de mejorar significativamente el capítulo de gastos de personal ayudaría a conseguir la tan ansiada paz política en nuestro ayuntamiento.
Es indignante comprobar como puestos de confianza políticos, dirigentes de los partidos políticos ocupan altos cargos en la “dirección” de los diferentes departamentos municipales después de haber consolidado fraudulentamente un puesto de trabajo que no merecen y que casi siempre es innecesario. Enchufados con grandes sueldos, escasa e inútil actividad que ahora son defendidos por los sindicatos como si se tratase de honradas limpiadoras o peones de jardinería. A la calle con 20 días de indemnización esos directores innecesarios, no son trabajadores ni nunca los hemos necesitado.
1 comentario:
Creo que en el Ayto. de Estepona sobran empleados a todos los niveles, desde altos cargos hasta peones y limpiadoras. Posiblemente, y refiriéndome a los trabajadores más modestos, no sea culpa suya lo de agravar la situación económica del Ayto., sino de los que los han metido en plantilla siendo totalmente innecesaria su colocación. Y es que por lo visto tenemos una plantilla de trabajadores de a pie, por llamarlos de alguna manera, que es mayor que la del ayto. de Málaga.
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