… que te compre. Como en el afamado cuento de Juan Valera y su burro esta semana volvimos a disfrutar en el pleno de la magnífica verborrea de los Sres. Crespo y Zamorano.
Atacados súbitamente por una dignidad que desconocen, quien no les conozca que les compre, tanto el imputado exsocialista como el ya condenado Crespo se lanzaron dialécticamente al cuello de nuestro alcalde y, por extensión, al de todos los ciudadanos.
Porque no cabe ninguna duda, en este momento todos los ciudadanos de bien debemos apoyar a los que denuncian las posibles actitudes corruptas en los foros. Y ese, según los atribulados imputados, es el pecado de David Valadez. Denunciar lo que creyó que era objeto de denuncia. Eso es lo que hicimos Los Verdes ante el Tribunal de Cuentas y esa es la obligación de cualquier ciudadano preocupado por el interés de lo público.
Como ha sido el interés público, estoy absolutamente seguro, la motivación de la UDYCO, la Fiscalía Anticorrupción y los diferentes tribunales de justicia que han participado en las diligencias del caso Astapa. Y esa certeza se extiende a la legitimidad y oportunidad de las medidas cautelares adoptadas por los jueces, incluidos los autos de prisión.
La actitud paranoica del Sr. Crespo y el Sr. Zamorano culpando de sus actuales males a las personas que hicieron lo que debían, aunque pueda ser humanamente comprensible no hace más que evidenciar la perturbada visión de la realidad de estos dos señores. No fue el Sr. Valadez quién les puso las esposas ni les condujo a los calabozos, sino todos los ciudadanos del país representados legítimamente por quienes tienen capacidad para ejercer la fuerza: La Policía y los jueces.
Más deberían releer los pasajes de lo ya conocido del sumario, y hacer memoria de otras cosas que también pueden estar en manos de la policía para encontrar a los auténticos culpables de su situación, que con casi total seguridad serán su propia ambición y avaricia desmedida. Durante el Pleno intentaron engañarnos como siempre pero ya sabemos, quien no les conozca, que les compre.
Atacados súbitamente por una dignidad que desconocen, quien no les conozca que les compre, tanto el imputado exsocialista como el ya condenado Crespo se lanzaron dialécticamente al cuello de nuestro alcalde y, por extensión, al de todos los ciudadanos.
Porque no cabe ninguna duda, en este momento todos los ciudadanos de bien debemos apoyar a los que denuncian las posibles actitudes corruptas en los foros. Y ese, según los atribulados imputados, es el pecado de David Valadez. Denunciar lo que creyó que era objeto de denuncia. Eso es lo que hicimos Los Verdes ante el Tribunal de Cuentas y esa es la obligación de cualquier ciudadano preocupado por el interés de lo público.
Como ha sido el interés público, estoy absolutamente seguro, la motivación de la UDYCO, la Fiscalía Anticorrupción y los diferentes tribunales de justicia que han participado en las diligencias del caso Astapa. Y esa certeza se extiende a la legitimidad y oportunidad de las medidas cautelares adoptadas por los jueces, incluidos los autos de prisión.
La actitud paranoica del Sr. Crespo y el Sr. Zamorano culpando de sus actuales males a las personas que hicieron lo que debían, aunque pueda ser humanamente comprensible no hace más que evidenciar la perturbada visión de la realidad de estos dos señores. No fue el Sr. Valadez quién les puso las esposas ni les condujo a los calabozos, sino todos los ciudadanos del país representados legítimamente por quienes tienen capacidad para ejercer la fuerza: La Policía y los jueces.
Más deberían releer los pasajes de lo ya conocido del sumario, y hacer memoria de otras cosas que también pueden estar en manos de la policía para encontrar a los auténticos culpables de su situación, que con casi total seguridad serán su propia ambición y avaricia desmedida. Durante el Pleno intentaron engañarnos como siempre pero ya sabemos, quien no les conozca, que les compre.