domingo, febrero 26, 2012

Publicado en Estepona Información el 25/02/2012

Dicen por ahí que estos años de constitución nos han dejado, entre otras cosas, la democratización de las instituciones más proclives al régimen anterior. La Judicatura y las Fuerzas de Seguridad del Estado son ahora fuertes bastiones democráticos sobre los que cabalga victorioso el Estado de Derecho.

Sin embargo, es fácil observar cómo esa afirmación de democráticos principios es tan frágil después de treinta años de monarquía liberal como en los primeros momentos de la transición.

El Tribunal Supremo se descuelga frecuentemente con sentencias atentatorias contra los derechos civiles de forma desvergonzada, y sus miembros, alguno de ellos provenientes de tribunales franquistas como el T.O.P no se cortan un pelo cuando con el crucifijo golpean sobre las libertades.

Las reiteradas sentencias contra Bildu y Amaiur, alguna de ellas enmendada afortunadamente por el Tribunal Supremo, o la más reciente persecución contra Garzón son muestras de su discrecionalidad y su tendenciosa significación política con la más rancia derecha española. Hay que recordar que Garzón, un personaje que no cuenta con mi devoción precisamente, ha sido un fiel aliado del Estado hasta que cometió la imprudencia de perseguir los crímenes del franquismo.

Estos días, el Gobierno de la Nación en lugar de actuar con contundencia contra los que atentan contra el estado de derecho con medidas adecuadas, les acoge bajo su seno, les protege y alienta. ¿No hubiese sido más fácil expedientar al brutal policía que arrastró del pelo a una niña de catorce años?

Eligiendo claramente la represión y atacando la libertad de expresión y la libertad de manifestación, la derecha que nos gobierna insiste en mostrarnos su auténtica cara. Mucho más cercana al idolatrado líder franquista Manuel Fraga –la calle era suya- que a los principios de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. No satisfechos con controlar el Gobierno y los medios de comunicación, pretenden acallar por la fuerza cualquier atisbo de protesta. Aunque lo que se pida sea no pasar frío en clase. Lo tengo claro, ellos son el enemigo.

Si lo hubiesen pensado antes

Publicado en Estepona Información el 18/02/2012

La reforma laboral aprobada por el gobierno de la derecha es valiente. Sin lugar a dudas la más valiente de todas las emprendidas en el país desde que se instauró el presente régimen constitucional al que me niego a llamar democracia.

Es valiente porque afronta por derecho el mayor problema de nuestro país y lo va a dejar resuelto de forma impecable. Sí, Rajoy y la chupi pandi están siendo los más valientes, dando una lección de entereza que no se veía por la Piel de Toro desde que se apagó la lucecita del Pardo.

Antes era responsabilidad de los gobiernos socialistas la ejecución de los recortes sociales solicitados y exigidos por los auténticos poderes europeos, los bancos y las grandes corporaciones. Les tocaba a los socialistas por su supuesta ascendencia sobre trabajadores y sindicatos. Y ellos se comían el marrón de buen gusto, que nunca les importó más que su propio y personal status.

Sin embargo, en esta ocasión Súper Rajoy ha acometido el mayor recorte de derechos sociales jamás perpetrado, y lo ha hecho desde la derecha, sin miedo alguno a la reacción del pueblo para el que debería gobernar.

No espera contestación social el Gobierno de Rajoy. Entre los socialistas y ellos han conseguido casi extinguir la “clase trabajadora”, todos en el paro, y convertir a los trabajadores fijos en cosa del pasado. Ahora el despido es más libre y más barato. Encontrar trabajo supondrá aceptar condiciones cercanas a la esclavitud y todavía tendrán que estar contentos los afortunados porque no se les aplicará el derecho de pernada salvo en condiciones excepcionales.

Los sindicalistas, pendientes ellos mismos de sus propios derechos, tiemblan ante la responsabilidad de convocar una huelga general que no tendrá el respaldo de los parados, siempre en huelga, ni de los activos, acojonados ante la que se les viene encima. Ya sé que no está bonito decir estas cosas cuando ocurre una desgracia, pero no puedo evitar pensar en esos trabajadores que votaron a la derecha y recordarles que quizá si lo hubiesen pensado antes ahora no estaríamos así.

Neofranquistas

Publicado en Estepona Información el 11/02/2012

Antes de la elección del Notario como Alcalde de nuestra localidad ya le califiqué, por su manera de actuar, como un personaje cercano al franquismo ideológico al que la democracia le resbala. Desde que llegó al “trono” municipal no ha hecho otra cosa que dar argumentos para reafirmarnos en esa convicción, pues no hace más que alardear de autoritarismo tanto con los afectos a la causa como con los trabajadores municipales.

Sus concejales, que deberían ser representantes de la voluntad popular, no son más que meros ejecutores de sus órdenes. Asustados en unos casos y con claro Síndrome de Estocolmo en otros obedecen sin rechistar todas y cada una de las órdenes que emanan del intocable Notario, que se rodea así de un halo entre veneración y terror parecido al que emanaba de la famosa “lucecita del Pardo” durante la dictadura del General Franco.

Aunque tenemos otro paralelismo mucho más cercano tanto en el tiempo, como en la actividad económica, como en el comportamiento político. El Notario parece que ha bebido profundamente de las fuentes “ideológicas” y tal y tal del fallecido Jesús Gil Gil. Así, comparte con su mentor ideológico el convertir a los concejales en empleados, su afición al negocio inmobiliario, su libre interpretación de la legalidad y su ímpetu cuando de apartar a quien le molesta se trata.

Los episodios relatados por el Vicesecretario Municipal nos retrotraen al año 1991 y la batalla que libró Gil Gil con el entonces Secretario Accidental del Ayuntamiento de Marbella, Pedro Moreno Brenes. Las reuniones se convocaban cuando Gil quería, él redactaba las actas y requería la sumisión de un funcionario de carrera que tuvo que requerir el amparo de la administración al verse atropellado en su trabajo.

Ya sé que no es comparable la chabacanería y vulgaridad de Gil Gil con la formación y exquisita educación de la que presume nuestro Notario. Sin embargo, el fondo de los hechos es exactamente el mismo. Desprecio a las formas, a la legalidad y a la democracia abusando del poder que le prestaron los ciudadanos. El neofranquismo nos rodea.

sábado, febrero 04, 2012

Masa Crítica


Publicado en Estepona Información el 04/02/2012

Dice wikipedia que la masa crítica es “es una celebración ciclista que tiene lugar todos los meses en numerosas ciudades del mundo. Su finalidad es reivindicar una mayor presencia de las bicicletas en las ciudades para reducir las molestias que causa el tráfico motorizado: ruido, contaminación, atascos, inseguridad...” Nada transgresora, exenta de perversas intenciones y planteando reivindicaciones tan racionales que incluso están “de moda”.

Tan de moda que no hay político que no hable de potenciar el uso de la bicicleta. De boquilla, claro. Porque luego está la práctica habitual de los gobiernos según sus capacidades normativas. Los gobiernos nacionales fomentan la industria del automóvil subvencionando los vehículos a gasoil de forma desvergonzada y contraria a lo que cuentan cuando de “medio ambiente” hablan. Primando las infraestructuras de carreteras frente al tren y potenciando el consumo de combustibles fósiles en lugar de la investigación e inversión en energías renovables y más limpias.

Los gobiernos locales hacen exactamente lo mismo. Hablan de calmado de tráfico y la bondad de la bici mientras en las infraestructuras nuevas renuncian a incorporar y facilitar su uso y en las reformas solo piensan en el tráfico de los vehículos a motor.

En Estepona un grupo de ciclistas celebra cada mes su Masa Crítica, intentando circular de forma respetuosa y ordenada por aquellos lugares que la Ley de Tráfico señala para las bicis. Las calles de las ciudades están hechas para ellas, además de para las motos y coches por mucho que alguno se empeñe en negarlo.

En la anterior etapa de Masa Crítica esteponera, (entre 2007 y 2009) jamás ocurrió ningún incidente. Cada mes entre 50 y 100 ciclistas circulaban de forma ordenada y divertida por la ciudad conviviendo perfectamente con peatones y automóviles. La Masa Crítica actual, retomada en noviembre de 2011, ha visto retrasada su salida dos veces por una mal entendida actitud protectora de la Policía Local. Desconocemos el origen de ese afán protector, pero estamos seguros que resulta innecesario y contraproducente.